martes, 8 de diciembre de 2009

En torno al cambio climático

Ya que se está celebrando la cumbre sobre el cambio climático en Copenhague viene bien leer estos dos textos. El primero es un clásico sobre una visión de la realidad donde la naturaleza queda plenamente integrada. El segundo es el manifiesto que con motivo de esta cumbre han publicado cristianos de distintas confesiones.

Seatle, jefe de la tribu Suwamish, hoy Estado de Washington, al noreste de los Estados Unidos se dirigió al Presidente Franklin Pierce en el año 1854, en respuesta al ofrecimiento que éste último le hacía de comprar una gran extensión de territorio indio a cambio de una "reserva segura" para su pueblo

CARTA DEL CACIQUE SEATLE


¿Cómo puede Ud. comprar o vender el cielo, o el calor de la tierra? La idea resulta extraña para nosotros. Si no nos pertenecen la frescura ni el destello del agua ¿cómo nos lo podrían comprar ustedes?
Cada partícula de esta tierra es sagrada para mi pueblo: El majestuoso pino, la arenosa ribera, la bruma de los bosques, cada insecto que nace con su zumbido, es sagrado en la memoria y en la experiencia de mi pueblo. La savia que recorre los árboles lleva los recuerdos del piel roja.
Los muertos del hombre blanco se olvidan de su tierra natal cuando se van a pasar entre las estrellas. Nuestros muertos jamás se olvidan de esta hermosa tierra, porque es ella la madre del piel roja. Somos parte de la tierra, y ella es parte nuestra. Las perfumadas flores son nuestras hermanas. El ciervo, el caballo, el águila majestuosa, las rocosas cumbres, el olor de las praderas, el calor corporal del potrillo son nuestros hermanos.
Por ello cuando el gran jefe de Washington nos manda decir que desea comprar nuestra tierra es mucho lo que está pidiendo de nosotros. El agua centelleante que corre por los arroyos y los ríos no es agua solamente, es sangre de nuestros antepasados. Si nosotros les vendemos la tierra, ustedes deberán recordar que es sagrada y deberán enseñar a sus hijos que es sagrada, y que cada imagen que se refleja en el agua cristalina de los lagos habla de acontecimientos y recuerdos de la vida de nuestro pueblo. El murmullo del agua es la voz del padre de mi padre.
Sabemos que el blanco no entiende nuestra manera de ser. Para él un pedazo de tierra es igual que el siguiente. Él es como un extraño que llega durante la noche y arranca de la tierra lo que necesita y se va. No mira a la tierra como su hermana, sino como enemiga. Y cuando la ha conquistado la abandona y se marcha a otra parte. Deja atrás las tumbas de sus padres, y no le importa. Viola la tierra de sus hijos, y no le importa. Olvida la tumba de su padre y los derechos de sus hijos. Trata a su madre la tierra y a su hermano el cielo como cosas que pueden comprarse, saquearse, ser vendidas, como carneros o relucientes abalorios. Su apetito devorará la tierra, pero detrás sólo quedará un desierto.
No sé. Nuestras costumbres son diferentes a las de ustedes. La imagen de sus ciudades hiere la mirada del piel roja. Pero posiblemente es porque el piel roja es salvaje y no entiende.
No hay tranquilidad en las ciudades del blanco. No hay en ella lugar donde se pueda escuchar el rumor de las hojas en primavera, o el susurro de las alas de un insecto. Pero quizás digo esto porque soy salvaje y no entiendo. En sus ciudades el ruido sólo insulta a los oídos. ¿Cómo sería la vida si el hombre no pudiera escuchar el grito solitario de la chotacabra o la animada conversación nocturna de los sapos en las ciénagas?
El indio ama el sonido suave de la brisa al deslizarse delicadamente sobre la superficie de la laguna, o ese olor característico del viento purificado por la llovizna mañanera y perfumado por la esencia de los pinos.
El aire es precioso para el piel roja, porque todas las cosas comparten el mismo aliento. La bestia, el árbol, el hombre, todos compartimos el mismo hálito. El hombre blanco parece no darse cuenta de que respira el aire. Como un ser que agoniza largamente, es insensible al mal olor. Pero si nosotros les vendemos nuestra tierra, ustedes deberán recordar que el aire es precioso para nosotros. Que el aire comparte su espíritu con toda la vida que él sustenta.
El aire que permitió su primer aliento a nuestro abuelo, también recibe su último suspiro. Y si nosotros les vendemos nuestra tierra, ustedes deberán mantenerla intacta y sagrada, como un lugar a donde incluso el hombre blanco pueda ir a saborear el viento purificado por el perfume de las flores.
Yo soy un salvaje y no entiendo otra forma de pensar. He visto miles de búfalos pudriéndose en la pradera, abandonados por los blancos después de balearlos desde un tren en marcha. Yo soy un salvaje y no entiendo cómo el humeante caballo de hierro puede ser más importante que el búfalo, al que nosotros sacrificamos sólo cuando lo necesitamos para subsistir. ¿Qué es el hombre sin las bestias? Si todas ellas desparecieran, el hombre moriría de una gran soledad de espíritu. Porque cualquier cosa que les ocurre a las bestias enseguida repercute en el hombre. Todos los seres estamos mutuamente vinculados.
Nosotros sabemos algo que el hombre blanco descubrirá algún día: que nuestro Dios es el mismo Dios. Ustedes piensan ahora que él es su propiedad, de la misma forma que desean ser propietarios de nuestra tierra. Pero no puede ser. Él es Dios de todos los seres humanos, y su compasión es la misma tanto para el piel roja como para el blanco.
La tierra es preciosa para Él, y hacer daño a la tierra es hacer un enorme desprecio para el Creador. Los blancos también desaparecerán. Tal vez antes que las demás tribus. Ensucia tu propia cama y cualquier noche te verás sofocado por tus propios excrementos.

MANIFIESTO DE IGLESIAS Y ORGANIZACIONES CRISTIANAS SOBRE EL CAMBIO CLIMÁTICO CON MOTIVO DE LA CUMBRE DE NACIONES UNIDAS EN COPENHAGUE

Las Iglesias y Organizaciones Cristianas firmantes, ante la grave situación generada por los efectos del Cambio Climático y la injusta e ineficaz gestión de los recursos del Planeta,

MANIFESTAMOS

• Que el Cambio Climático y sus efectos están agravando los problemas humanitarios (hambre, enfermedades, conflictos, desastres naturales, migración y desplazamiento de población, etc.), convirtiéndose en uno de los problemas más graves de nuestro tiempo.
• Que la injusta y negligente gestión de los recursos globales, junto a los desastres naturales están causando la muerte y el sufrimiento de millones de personas, la destrucción de ecosistemas y la extinción de especies en todo el planeta.
Señalamos, a modo de ejemplo, algunos de los daños que está causando:
 El aumento de los desplazados y refugiados. Según datos de Naciones Unidas, el número de personas afectadas en África por desastres naturales se ha acercado a los 17 millones en 2008; en el mundo, más de 65 millones de personas fueron afectados por inundaciones y tormentas en el mismo año.
 La muerte, cada año, de más de 150.000 personas, según los datos facilitados por la Organización Mundial de la Salud.
 El agotamiento del agua dulce en distintos puntos del planeta está provocando un proceso alarmante de desertización e incrementa la escasez de alimentos. Un ejemplo es el lago Chad, del que depende la supervivencia de una gran región habitada de África (Camerún, Níger, Nigeria y Chad) que se encuentra abocado, en los diez próximos años, a la sequía total y a posibles conflictos por la desaparición de las fronteras naturales. Esta situación está en gran parte provocada por el hombre.
También en España podemos constatar la huella de esta crisis ambiental y de la mala gestión de los recursos, a través de un proceso lento pero imparable de desertización, que amenaza ya a un 30% del territorio. Todos tenemos noticia del daño y desaparición de algunos de los humedales más representativos; la creciente contaminación de ciudades y pueblos; la progresiva llegada de inmigrantes, que han sido desplazados por el hambre, las enfermedades y las catástrofes naturales.
La conciencia de la gravedad y la urgente necesidad de encontrar soluciones a esta crisis global nos empuja a los firmantes a tomar una postura común y fraterna a favor de toda la vida que habita la Tierra y sus ecosistemas, fruto y don precioso del Creador para toda la humanidad. Ante ello, como cristianos, queremos manifestar nuestro compromiso fraterno y solidario con los que ya son víctimas de estas dramáticas consecuencias climáticas (inundaciones, hambre, muertes...), asumiendo también nuestra responsabilidad presente y el legado que dejamos a las siguientes generaciones.
Movidos por nuestra fe en Cristo, alumbrados por la palabra de Dios y en sintonía con los diversos documentos y declaraciones de las Iglesias Cristianas europeas sobre este tema, como las recogidas en la III Asamblea Ecuménica Europea de 2007 en Sibiu (Rumanía), respecto a la “protección de la Creación y la promoción de estilos de vida sostenibles para invertir la tendencia del cambio climático”, nos unimos a la iniciativa de las Iglesias Cristianas de Europa (www.bellringing350.org) –representadas conjuntamente por el Consejo de Iglesias Europeas y el Consejo Europeo de Conferencias Episcopales (http://cec-kek.org/pdf/ENClimatechange.pdf)- de cara a la Conferencia de la ONU sobre el Clima que se celebrará del 7 al 18 de diciembre en Copenhague (Dinamarca).

Pedimos a nuestros representantes políticos:
• Un compromiso urgente y eficaz, un pacto real, sincero y vinculante en el ámbito social, político y económico para frenar las consecuencias del Cambio Climático y mejorar la gestión de los recursos naturales.
• Una reducción urgente de las emisiones de anhídrido carbónico (CO2) en la atmósfera hasta mantenerlas en un límite sostenible (que, según los científicos, se cifra en unas 350 partículas por millón, frente a la estimación de las 390 que ya hemos alcanzado).
• El cumplimiento de los compromisos políticos y medioambientales adquiridos a nivel internacional, desde el Protocolo de Kyoto (1997).
• La creación de los organismos y la aplicación de los medios necesarios para traducir en hechos reales los acuerdos alcanzados respecto a:
 La desertización.
 El desarrollo y aplicación de tecnologías y estrategias que aporten alternativas de desarrollo sostenible frente al uso de las energías basadas en combustibles fósiles.
 Los planes de urbanismo, exigiendo que sean compatibles con los recursos naturales del entorno.
• La aplicación urgente de estos correctivos: su demora puede invalidar los acuerdos y agravar los daños producidos hasta ahora, en algunos casos irreparables.
Hacemos también una llamada personal a tomar conciencia de nuestra responsabilidad individual y familiar como ciudadanos y gestores de nuestra Tierra común. Esto nos exige un cambio en nuestros hábitos de conducta y consumo, además de un compromiso ético frente al desastre ecológico y el desequilibrio en el reparto de los recursos en el planeta.
Desde nuestras iglesias queremos fomentar alianzas, pactos e iniciativas que nos ayuden a comprender la magnitud de este problema así como aportar ideas y soluciones factibles, fruto del diálogo y la responsabilidad de toda la sociedad. A ello nos comprometemos desde la formación, la acción y la oración, en diálogo abierto y fraterno con todos en la sociedad.
Pedimos a Dios que nos conceda la valentía y la sabiduría precisas para afrontar, desde el Evangelio de Jesús y en solidaridad con los que sufren, el reto de hacer de este mundo un lugar más justo, fraterno y sostenible.
Unidos a Dios en su Creación, y solicitando Su bendición para todos los que habitamos y poblamos esta Tierra.

Firmado en Madrid, a día 7 de diciembre de 2009 por los presentes:

Arzobispado Ortodoxo de España y Portugal. Patriarcado Ecuménico de Constantinopla
Comisión General de Justicia y Paz España
Comunidad Evangélica de Habla Alemana. Madrid
Iglesia Española Reformada Episcopal
Iglesia Evangélica Española
Iglesia Ortodoxa Rumana en Madrid
Iglesia Ortodoxa Rusa en España - Patriarcado de Moscú
Foro Ecuménico Pentecostés

jueves, 8 de octubre de 2009

Experiencia de verano en Acoyotla


Los misioneros javerianos de España hemos organizado una formación misionera anual, con la posibilidad de completarla durante un mes de verano visitando alguna de nuestras comunidades en misión. El pasado curso se inició esta formación y en el mes de agosto cinco personas hemos vivido la primera experiencia en la misión de Acoyotla, en México. Esta localidad está situada en una zona montañosa de gran belleza, en el territorio de los indígenas náhuatl, descendientes de los antiguos aztecas. De hecho en el mismo Acoyotla hay una pirámide en ruinas, lo que demuestra que es un lugar poblado desde hace mucho tiempo. A pesar del pasado esplendor, la vida en Acoyotla es dura porque el agua aún no llega a las casas, y son fundamentalmente las mujeres y los niños quienes la acarrean. Tampoco hay carretera asfaltada, y de hecho hasta hace pocos años el medio de desplazamiento, también de los misioneros, era el caballo.


Desde Acoyotla los misioneros javerianos allí presentes atienden 17 poblaciones, algunas de difícil acceso. En los pocos días que hemos estado hemos podido visitar casi todas estas poblaciones. A la mayoría hemos ido en camioneta, pero también nos hemos desplazado a pie.
Cada población tiene su propia idiosincrasia, y a esas características propias hemos adaptado las actividades que hemos ido ofreciendo en cada lugar. En general, hemos querido en un primer momento hacer juegos con los niños. Los niños son numerosos, y en la época en que hemos estado en Acoyotla gozaban de sus vacaciones escolares, que pasan sobre todo ayudando algo en las tareas domésticas y sobre todo viendo la televisión por los pocos alicientes que ofrece su mundo. Hemos logrado que se diviertan juntos a pesar de su timidez. También hemos apreciado en ellos lo obedientes y honrados que son, y lo atentos que están los niños mayores a sus hermanitos más pequeños.
Hemos querido también encontrarnos con los adolescentes para hablar con ellos de la afectividad y de la sexualidad como camino para expresar el amor. Y también nos hemos encontrado con los adultos para, desde la Palabra de Dios, ver su realidad y escuchar sus problemas. Sobre todo las mujeres nos han buscado para hablar más personalmente con nosotros y desahogarse por las situaciones difíciles que viven.
Hemos visitado a los enfermos en sus casas, visitas que han resultado muy significativas para nosotros, y hemos celebrado la eucaristía con la comunidad cristiana de cada población. Dentro de esas eucaristías hemos celebrado otros sacramentos: bautismos, bodas, unciones de enfermos…


Pero sabemos que, independientemente de lo que hayamos podido aportar, hemos recibido mucho: en hospitalidad, manifestada en sonrisas y en más invitaciones a comer de las que nuestros estómagos podían soportar, en aprecio y estima, en generosidad, en fe compartida… Estas personas reconocen la importancia de recibir visitas, sobre todo cuando esas visitas llegan de la lejanísima España, que la mayoría de ellos no sabe situar en el mapa.
Aunque íbamos con un cierto temor por las diferencias en el estilo de vida y comida, por los problemas sanitarios de los que los medios de comunicación se están haciendo eco y porque ninguno de nosotros conocía previamente esa zona, el resultado de esta experiencia ha sido sin duda muy satisfactorio. Reconocemos que gran parte del éxito la debemos a la preparación previa que los misioneros javerianos de México, y especialmente la comunidad de Acoyotla, han hecho con las poblaciones anunciando nuestra llegada y a su compañía constante mientras hemos estado allí. Un gracias enorme a todos.


La formación sigue. Desde estas líneas queremos invitaros a la nueva formación misionera, que incluye esta posibilidad de un mes en nuestra misión. Los encuentros serán en nuestras casas de Madrid y de Murcia. El primer encuentro en Madrid será el 24 de octubre, y el primero en Murcia el 8 de noviembre. Además en Murcia presentaremos esta experiencia con más fotos y tiempo en nuestra casa este sábado 10 de octubre (calle Las Palmas, 5 1º). Quienes queráis participar en la formación podéis poneros en contacto con nosotros.

martes, 4 de agosto de 2009

Décimo día : ¡Finalmente pisan nuestros pies tus umbrales, ... Javier!

NOVENA ETAPA: LUMBIER-JAVIER (3 HORAS Y MEDIA)
“Protagonismo del Espíritu”

Hoy sí, por fin y tras nueve días, comenzamos la oración cantando algo decente. En fin, hay división de opiniones, es discutible, pero ya nos entendemos… El suelo duro y frío de esta mañana hizo mella en el animador de la oración, el culpable de la selección de cantos a lo largo de estos días.
El paisaje magnífico de la Foz de Lumbier animaba nuestro caminar y nuestra ilusión por llegar a Javier. La verdad es que el contemplar por vez primera la bandera y la torre del castillo desde lo alto de la Cañada de los Roncaleses nos provocó una primera emoción especial. Ya sólo faltaba la bajada, entre piedras y mucho calor, ya con los pies cansados.
Llegamos al albergue diocesano y, tras una ducha, comida y descanso, nos dirigimos al castillo de Javier, meta final de nuestra peregrinación. Visitamos la basílica, donde se encuentra el lugar de nacimiento de San Francisco Javier, el castillo y luego fuimos recibidos por Jose Mari, delegado de Misiones de la Diócesis, y nuestro amigo Javier. Con ellos, charlamos de toda la marcha y de las múltiples posibilidades y maneras de acercar la ruta a los demás. Nos comprometimos a preparar una especie de eco de la marcha es su diversas facetas: el itinerario, los alojamientos, la vivencia espiritual… Ya por último, celebramos la eucaristía en la parroquia donde fue bautizado San Francisco. Era la última antes de la partida y en ella enlazamos con la primera que celebramos en Loiola. Al finalizar la celebración, nos acercamos juntos a la pila bautismal de nuestro santo para cantar uno de los estribillos famosos de nuestra ruta: “Ayúdame a caminar, contigo iré sobre las olas de la mar”.
La noche cae sobre Javier y nuestra peregrinación llega también a su fin. Sin embargo, tenemos por delante el difícil y apasionante camino de nuestras vidas.





Al final no podemos no dar las gracias a todas/todos que nos han ayudado y sostenido en nuestra marcha, empezando, no podía ser de otra manera, por Javier, Marisol, Paulino, Roberto, ... de la parroquia de San Francisco Javier, Pamplona. Nos siguen y apoyan (cuantas horas andando, juntos, a veces perdidos, por los montes de Navarra y Guipuzcoa buscando el camino) desde hace muchísimo tiempo. Con ellos no queremos, ni podemos, olvidar José Mari, párroco de San Francisco Javier y nuevo Delegado de Misiones de la diócesis de Pamplona. Actualmente está trabajando en Calcuta, acompañando los moribundos en un centro de las Misioneras de la Caridad (de Madre Teresa). Te acompañamos con nuestras oraciones, José Mari.
Y ... el párroco y el ayuntamiento de Bidania, el párroco de Alegia, de Lekunberri, de Burlada, de la parroquia de Ermitagaña (Pamplona), de Lumbier, de Javier. Junto a la comunidad de ADSIS que nos ha abierto las puertas de la casa de Azkarate, la hermanas que cuidan de la iglesia parroquial de Javier, Antonio que nos ha acogido en el albergue de Javier, ...
Y todos aquellas/aquellos que de una manera o la otra nos has sostenido con sus recuerdo y oraciones. ¡HASTA EL AÑO QUE VIENE!

Noveno día : la vigilia ...

OCTAVA ETAPA: ARTAIZ-LUMBIER (4 HORAS Y MEDIA)
“Audacia apostólica”

La marcha nos pareció más larga, si bien la proposición de continuar hasta Javier nos tentó, a unos más que a otros… Comida junto al río Irati a la entrada de Lumbier. El fresco de las aguas del río alivió nuestro cansancio y, cómo no, una siesta. Sin ella no podríamos haber superado la plática de Rolando que nos dejó mudos. Y eso que Jesús nos había despertado de la siesta con las "mañanitas".
Ya en Lumbier, visita al lugar y acomodo en la casa parroquial. Antes de la cena, la eucaristía con el pueblo, presidida por un misionero de los Padres Blancos recién llegado de Rwanda. Son jornadas estas de mucho calor.



Octavo día : ¡dirección Javier!

SÉPTIMA ETAPA: BURLADA-ARTAIZ (4 HORAS)
“Sé de quién me he fiado”

Volvemos a nuestra marcha hacia Javier y entramos en el Valle de Izagaondoa, impresionante por sus tierras, cultivos y luminosidad. Los pueblos, muy pequeños, nos transportaban a otras épocas y sus colores amarillos no resultaban menos hermosos que el verde guipuzcoano. Después de los bocadillos, la siesta y una reflexión sobre la confianza en Dios. Tuvimos ocasión de visitar en Artaiz la iglesia románica de San Martín de Tours, muestra arquitectónica del románico popular navarro.
De regreso a Burlada, donde volvíamos a dormir por motivos logísticos, celebramos la eucaristía en la parroquia. A continuación, Koldo nos invitó a tomarnos unas merecidas cervezas, momento donde pudimos compartir impresiones de todo lo que veníamos viviendo durante la marcha.
En el momento de la cena, nos visitaron Cristina y Dani, miembros del grupo de familias misioneras javerianas. Dos viejos amigos de Rolando y Gigi que también se compartieron con nosotros. Un placer haberlos conocido.


Séptimo día : ... pisando el "sacro suelo" de Pamplona

SEXTA ETAPA: BURLADA-PAMPLONA-BURLADA (6 HORAS)
“Hacerse todo a todos”

Comenzamos el día en la comunidad parroquial de Burlada, celebrando la eucaristía. Supuso el encuentro con muchos amigos. Todos tuvimos trabajo gracias a Koldo, el párroco: organista, lectores… Una muy buena acogida, con invitación incluida para comer. Pero no había tiempo: nos fuimos a conocer Pamplona andando, por supuesto. Visitamos la catedral, San Saturnino, San Francisco Javier, San Lorenzo, el lugar de la caída de San Ignacio, la calle Estafeta, la Plaza de Toros, el Ayuntamiento, el monumento al encierro (con cogida incluida), la Taconera, la Ciudadela (con comida campestre y siesta en el césped), etc.
Una jornada que se preveía de descanso y dio mucho más de sí de lo que se esperaba. Ya a la tarde, nuestros amigos Marisol y Javier nos acompañaron en la reflexión, seguida de la cena donde festejamos el cumpleaños de Ana, con tarta y cava.



Sexto día : Burlada

QUINTA ETAPA: SARASATE-BURLADA (4 HORAS)
“Fundadores de comunidades”

A pesar del programa, que preveía una parte en autobús, hicimos todo el recorrido andando, de modo que hubo que atravesar un polígono industrial y un largo trayecto paralelo a la autovía. La verdad, un horror: asfalto, asfalto, asfalto…
Jesús no tenía un pedazo de césped. Procuraba a toda costa pisar un trozo de tierra, incluso cuando era imposible, pero “nada es imposible para ti, Jesús”.
Ya en Burlada, ¡cómo no!, a casa de los Javerianos. Durante la tarde, tuvimos el rato de compartir durante la eucaristía que celebramos en la propia casa. “Risotto alla milanese”, hambre voraz y alcachofas con patatas (siempre un poco de sopa delante, ya sabéis). Un buen descanso nos prepara para despertar el domingo.




El (...) chiste del día :

Quinto día : ¿valientes o ... locos?

CUARTA ETAPA: AZKÁRATE-LEKUNBERRI-SARASATE (8 HORAS)
”¡Ay de mí si no evangelizo!”

¿Locos? Sí. Iniciando con una eucaristía, no nos imaginábamos el día que teníamos por delante. Alegres, empezamos a perdernos nada más salir de Azkárate, pues no había más camino que unas espinas. Sin embargo, después de diez minutos y mucho tesón, nuestro camino tuvo buena marcha… tan buena que, a pesar de la cuesta de entrada a Albiasu, llegamos a Lekunberri y llenos de entusiasmo y por unanimidad, decidimos hacer la siguiente etapa para ganar un día en Pamplona (una cama y agua caliente nos esperaban).
A las 19.45 llegamos a Sarasate, recibidos por tres sonrisas inolvidables: las de Paulino, Marisol y Javier. Estos tres amigos de Pamplona, que conocen a los Misioneros Javerianos desde hace mucho tiempo, nos prepararon la cena, ¡y qué cena! Alimentamos nuestros ánimos compartiendo inquietudes y sensaciones hasta las 12 de la noche. Y es que momentos así no se pueden dejar pasar. Así que finalizamos la jornada incluso compartiendo la oración entre todos.





P.D. ¿Y la sandía? Ni rastro de ella.

lunes, 3 de agosto de 2009

Cuarto día : llegamos a Navarra

TERCERA ETAPA: ALTZO-AZKÁRATE (3 HORAS Y MEDIA)
“Atravesando fronteras; al encuentro de otras culturas”.
Etapa corta, pero, como siempre, sin un metro de llano. Lo bueno, que era escasa la distancia.
Comenzamos la jornada con la oración, momento que definitivamente nos despertó con un desastroso “Cristo te necesita para amar”, de mano de Jesús y Ana, incapaces de sacar adelante la canción.
Emprendimos camino un poco más tarde de lo habitual, si bien a los pocos metros ya teníamos a Noemí rezagada cogiendo laurel para la cena. Lo más duro fue crestear la cordillera “andina”, contemplando el paisaje alucinante desde las plataformas de caza que por allí se encontraban. Tras cruzar la frontera entre Gipuzkoa y Navarra llegamos a Azkárate, donde fuimos acogidos en la casa de las Comunidades de Adsis, que nos dejó boquiabiertos a todos. Pudimos darnos una buena ducha y hacer una colada en condiciones.
En el encuentro de la tarde, se produjo una reflexión interesante sobre los milagros de Jesús, que retomamos en la eucaristía compartida en la misma capilla de la casa, con hermosas vistas a la montaña. La guitarra, esta vez sí, nos entonó a todos y nos animó durante la preparación de la cena. El ambiente poco a poco se va distendiendo y las bromas se suceden. La comida del día, bien suculenta: pasta para la comida, aprobada por Italia, Asturias y, tácitamente, Linares; México sigue prefiriendo bocadillo (¡estos americanos! –Gigi dixit). Y patatas a la riojana por la noche. Siempre la sopa en la cena, a diario, y la ensalada.
Son ya horas. Nuestro camino a Javier continúa en nuestros corazones, pero, de momento, nos vamos a la cama que estamos ya cansados.




P.D.: Por fin ha caído la sandía… al menos, parte de ella. D.E.P.

Tercer día

SEGUNDA ETAPA: BIDANIA-ALTZO (4H. Y MEDIA)
“Cristo en el centro, Cristo crucificado”.

Como cada mañana, comenzamos con la oración en torno a estas palabras que aúnan las personalidades de San Francisco Javier y San Pablo. Poco a poco, dejábamos Bidania atrás para dirigirnos hacia Altzo tras continuas subidas y bajadas prolongadas. El día acompañaba, tras algo de lluvia por la noche.
Poco antes de llegar al final de la etapa, parada en Alegia para tomarnos una cervecita bien fría. Una vez en Altzo, comimos en la plaza del pueblo; siesta de rigor, si bien durante este momento alguno desapareció y se perdió el café. Ya a las cinco, comenzamos la reunión del día sobre las palabras que motivaban la jornada: “Cristo en el centro, Cristo crucificado”. Estas palabras se encarnaron en nuestras propias piernas, llenas de arañazos por la travesía entre zarzas. Además, sucedió una pequeña anécdota (un bicho en un ojo de Ana) que proporcionó la ocasión de conocer los trenes de cercanías de Gipuzkoa hasta Tolosa, donde encontramos un ambulatorio.
A pesar de los contratiempos, celebramos la eucaristía, preparamos la cena y acogimos el merecido descanso.
Esta tarde llegó la guitarra y, con ella, la fiesta (una vez que conseguimos afinarla…)




P.D.: Ay, la sandía… ¡salvada por los pelos… upps, era por un ojo!

Secundo día : la salida

PRIMERA ETAPA: LOIOLA – BIDANIA (5 horas)
“Señor, ¿qué quieres que yo haga?”

Hoy nos hemos puesto en marcha. Arrancamos el día a las 7.30 con la oración, preparada por Jesús e inspirada en dos textos de San Pablo y San Francisco Javier, nuestros dos compañeros de ruta. A continuación, el desayuno para cargar fuerzas y emprender la marcha a las 8.45. La etapa comprendía unos 18 km, en principio poca cosa si no fuera que el terreno ascendía y descendía continuamente entre praderas, bosques y bastante ganado. Unas cinco horas de camino para llegar a Bidania pasadas las 13.30, donde fuimos acogidos en el pabellón del frontón municipal, así que hoy hubo ducha caliente y todo…
Preparamos la comida, algo que va a ser una rutina hasta el final del camino y la tarde la ocupamos en un rato de reflexión sobre las semejanzas entre Javier y Pablo. Quedó latiendo la pregunta siguiente: “¿Quién es Jesús para ti?”. Celebramos la eucaristía en la iglesia del pueblo con unas monjas Siervas de Jesús. Ahora estamos preparando la cena, ya a punto de cenar, así que luego lo retomamos.
Después de unos cuantos… cómo decirlo, ¿desaguisados?, ¿accidentes?, ¿torpezas?, pudimos finalizar la cena en paz y retomar este “post” con el que esperamos invitaros a intercambiar vuestros comentarios a lo largo de estos días. Prometemos mantener el contacto mientras la conexión nos lo permita. ¡Agur!




P.D.: Gigi no ha cumplido su amenaza y la sandía aún sigue viaje con nosotros. Ha sacrificado una manzana en su lugar. La excusa es que era la última.

Desde Loyola, casi a tiempo ...

... legamos con el blog de la marcha. Era nuestra intención colgar algo a cada etapa. Por la bien conocida ley de Murphy ... no pudimos conectarnos nunca a internet. Nuestros supe modernos medios de comunicación fallaron. Signo divino, tal vez, porque la conexión volvió a hacerse presente justo … el día después.
Misterios de la informática.
Aquí vamos, entonces. Que disfrutéis.

Gigi.

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DÍA DEL ENCUENTRO: LOIOLA,20 JULIO - 16 H.
Roberto aterriza en Loiola a las 8.30 de la mañana. A través de una espesa niebla, llega al caserío Ule para recoger la llave y esperar al resto del grupo. La quedada estaba prevista para las 16 h. delante del santuario.
Hola, amigos. Somos seis compañeros reunidos ayer por vez primera para emprender la marcha de Loiola (Guipúzcoa) a Javier (Navarra). La iniciativa corre a cargo de los Misioneros Javerianos, entre ellos se encuentran Gigi (italiano residente en Murcia) y Rolando (mexicano que lleva un año por España). Los demás somos Roberto, de Linares (Jaén); Jesús, desde Burgos; Noemí y Ana, asturianas.
Nada más encontrarnos y tras un rato de presentaciones, visitamos la casa natal de San Ignacio de Loiola y el santuario. En la misma casa, en concreto en el cuarto de su conversión, actualmente capilla, nos reunimos para celebrar la eucaristía que daba sentido y el pistoletazo de salida a nuestra marcha. Aquí, en su casa natal y en el lugar de su nuevo nacimiento, nos ponemos en manos de Dios para un nuevo nacer en nuestras vidas, un nuevo caminar hacia senderos desconocidos por nosotros, guiados por San Pablo y San Francisco Javier.
Al caer la tarde, nos dirigimos al caserío donde íbamos a ser acogidos y bien acogidos. Una familia de fe nos abrió sus puertas y compartió con nosotros su vida, sus dificultades cotidianas llevadas con serenidad, cariño y sencillez, sentimientos que también nos regalaron.





P.D.: Tenemos una sandía llegada de Orense, vía Madrid. Gigi amenaza con “matarla”, pero…

lunes, 20 de julio de 2009

Vamos de marcha ...

... de Loyola a Javier. ¿Las fechas? : del 20 de julio y hasta el 30 del mismo mes. Somos ... seis (poquitos pero animados). A ver si el año que viene alguien se anima.
Por ahora intentaremos teneros al tanto, si posible día tràs días.
Contamos con vostras/vosotros.

Esta tarde, quizàs, una primera imagen.
Hasta pronto,

Gigi

viernes, 29 de mayo de 2009

Entrevista a Antxon en Auria TV

Hace unos días, en Auria TV (Ourense) han entrevistado a Antxon. Aquí van las tres secciones del video :

- primera parte :


- segunda parte :


- tercera parte :


Si quieres reaccionar, puedes escribir directamente un comentario o escribir a Antxon

miércoles, 29 de abril de 2009

Cuento sobre la crisis

ANTE LA CRISIS, ¿QUÉ?

El rey león convocó a todos los animales de la selva para comunicarles la noticia que temían:
- La crisis ha llegado a nuestro mundo.
Los animales ya habían oído que la crisis azotaba el mundo de los humanos, y por experiencia sabían que, tarde o temprano, lo que afectaba a los humanos terminaba salpicándoles también a ellos. Pero una confirmación oficial siempre genera inquietud. Tras un instante de silencio reflexivo, algunos animales empezaron a expresar sus posiciones.
- ¿Crisis? ¿Qué crisis? En mi mundo ni ha llegado ni llegará esa dichosa crisis, así que a él me vuelvo.
Dicho esto, el topo volvió a desaparecer en el subsuelo del que había salido. Su toma de postura produjo un cierto revuelo y otros animales, de parecidas dimensiones a las suyas, decidieron escabullirse por el agujero que el topo había dejado.
La tortuga dijo:
- Yo por ese agujero tan pequeño no entro, pero sí que puedo encerrarme en mi casa y esperar a que la crisis pase.
Y se metió en su caparazón. Esto animó a otros animales a hacer lo mismo, o a evadirse anticipando la hibernación, e incluso algunos decidieron migrar aunque no fuese la época.
Y hubo quienes se alegraron con el anuncio de la crisis: las aves carroñeras levantaron el vuelo para ir a posarse en algún lugar con buena panorámica y esperar acontecimientos.
El rey león se encontró ante sí a los pocos animales que querían afrontar con él la situación. A ellos les planteó la pregunta inevitable:
- ¿Qué podemos hacer?
Las ideas empezaron a surgir, primero tímidamente, después con más alegría y confianza. Palabras como “compartir”, “austeridad”, “ir a los esencial”… se escucharon repetidamente. Pero por encima de la posibilidad de encontrar soluciones lo que les iba animando era el espíritu de unión y de trabajo en equipo con el que afrontaban esta situación y la complicidad al verse implicados en un proyecto común de consecuencias universales.


PREGUNTAS:

1) ¿Entre las personas hay también quienes se evaden o huyen ante la crisis? ¿Y quiénes pueden ser los carroñeros?
2) En una reciente Pascua en Sucina hemos reflexionado sobre “Pasión, muerte y resurrección en tiempos de crisis”. Lee en www.javerianos.org los comentarios de quienes han participado y algunos de los materiales que hemos empleado.
3) Y la pregunta del rey león vale también para nosotros: ¿Qué podemos hacer? Entre los materiales antes mencionados hay quien aporta posibles respuestas. Reflexiona en tu grupo y mándanos tus sugerencias a nuestro blog.

lunes, 27 de abril de 2009

Pascua en Sucina. Homilía.

HOMILÍA PASCUAL

1) ¿Las piedras se mueven solas?
2) Un mundo de colores.
3) La muerte como compañera.
4) La fe también come.
5) A la escucha de los crucificados.
6) ¿Sugestión colectiva o fuerza de Dios?

1) Las mujeres encuentran movida la piedra del sepulcro. Esto me recuerda un cuento oído recientemente: un padre invita a su hijo a mover una piedra enorme. El hijo lo intenta con todas sus fuerzas, empujando de todos lados, haciendo palanca con todo lo que encuentra… hasta que desiste y dice a su padre que se rinde: “He intentado mover la piedra de todas las formas posibles y no he podido”. A lo que el padre responde: “¿De todas las formas posibles? ¿Estás seguro? No lo creo, porque aún no me has pedido ayuda”. Trasladado el mensaje del cuento a nuestra relación con Dios nos damos cuenta de que ciertos logros no los podemos alcanzar solos. Aunque todos unidos queramos resucitar a Jesús, no lo lograremos. Hace falta la fuerza de Dios para esto y para todo. Aunque eso sí, Dios conoce los deseos profundos que llevamos en nuestro corazón y los tiene en cuenta.

2) La piedra movida y el sepulcro vacío no son más que signos ambiguos. De hecho, cuando se hacen encuestas entre los cristianos sobre los dogmas en los que creen y en los que no creen, menos de la mitad responden creer en la resurrección. Como diría San Pablo, si Cristo no ha resucitado, vana es nuestra fe. Pero si Cristo ha resucitado, ¡todo adquiere sentido! Podemos soñar con un mundo mejor, podemos ver la vida llena de colores, podemos creer en que el bien vence al mal, la vida a la muerte, la justicia a la injusticia, la bondad a la violencia, la verdad a la mentira… porque Dios así lo ha demostrado resucitando a su Hijo Jesús. No somos ingenuos y sabemos que somos cómplices del mal de nuestro mundo, pero eso no nos paraliza para comprometernos en la transformación de la realidad porque Dios se hace garante de que nuestros esfuerzos, de forma que nosotros no conocemos, tendrán fruto.

3) Todo esto no nos evita ni el sufrimiento, ni el fracaso, ni la muerte. La muerte nos va a seguir visitando con dolor, dejándonos mil preguntas y ninguna respuesta… Pero ya no es lo mismo: las puertas de la vida han quedado abiertas para nosotros de par en par, la muerte se ha vuelto un nuevo nacimiento a otra realidad.
Tengo una amiga que ante hechos dolorosos como la muerte de alguien cercano, enfermedades… me comenta: “¡Qué suerte tenéis los que creéis!” Siendo esta afirmación verdad, me despierta una alarma de peligro, porque podemos entender mal la fe, querer poseerla o creer que nos basta guardarla en una caja fuerte y tenemos todo resuelto. Nada de esto: la fe se fortalece dándola, la fe necesita ser alimentada y ser puesta en juego. Si no, se evapora.

4) ¿Cómo podemos alimentar nuestra fe en la resurrección? Hay medios evidentes, en los que no insisto: los sacramentos y la escucha de la Palabra de Dios. Me detengo en otros dos menos evidentes. Por un lado, el amor gratuito. No haría falta añadir “gratuito” al sustantivo “amor”, pero nos damos cuenta de lo mucho que lo que nosotros llamamos amor está condicionado por la búsqueda de un beneficio para nosotros. El amor gratuito nos lleva a la cercanía con los crucificados de hoy, a la solidaridad con los últimos. Por desgracia, son muchos: ¡hay tantos pies que lavar y tantos crucificados en la cuneta de nuestra historia! Y con la crisis de nuestra sociedad occidental la cifra de crucificados va a aumentar… Nos queda la esperanza de que, si la cruz de Cristo es camino de vida, también las nuestras lo serán.

5) Esa cercanía a los crucificados no tiene como objetivo principal ayudar (aunque naturalmente esto no queda excluido), sino escuchar y aprender ¿Pueden los últimos de nuestro mundo enseñarnos algo? El mismo Jesús daba gracias a Dios porque los sencillos entendían las cosas de Dios, y nosotros estamos llamados a la misma experiencia de descubrir vida donde a simple vista sólo hay muerte. En este sentido, ¡cuánta vida se puede celebrar durante una vigilia pascual en África, por ejemplo, continente crucificado por excelencia! Precisamente cuando mayor es la oscuridad, más apreciamos la luz. Lo mismo pasa con la vida: donde la muerte es señora la fiesta de la vida se celebra con especial entusiasmo. De hecho, los misioneros que hemos pasado por Chad nos decíamos que nos bastaba la celebración de la Pascua para sentirnos gratificados y con fuerzas para todo el año por la vida que recibimos a raudales en ese momento.

6) Claro, todo esto puede no ser más que una ilusión, una sugestión colectiva. Volvemos a lo del inicio: los signos visibles de la resurrección en los relatos de los evangelios son ambiguos. Juan, Pedro, María Magdalena… se encontraron con la piedra del sepulcro quitada y la tumba vacía ¿Por causas humanas o por la fuerza de Dios? Ellos creyeron en esta última respuesta y su vida se transformó: crecieron en fe y en humanidad, transmitieron vida a otros, fueron valientes y verdaderos, anunciaron la Palabra… Ellos son la mejor prueba de que Jesús ha resucitado. Y si ellos transformaron sus vidas, nosotros también podemos.

martes, 21 de abril de 2009

"El metro" de Donato Ndongo

Por casualidad me encontré en la biblioteca con este libro. Su autor es un ecuatoguineano que me gusta cómo presenta cada mes alguna noticia de África en la revista Mundo Negro.
El libro nos habla de cómo un africano vive y ve la realidad de nuestro país a partir de su cultura y de su ideosincrasia propia.
Pero el libro nos lleva a descubrir la vida, la cultura y las tradiciones de una zona de Camerún muy próxima con Guinea Ecuatorial. El régimen político casi dictatorial y la pobreza de la gente. Es, precisamente, a causa de esta pobreza que el protagonista se ve obligado a emigrar. Y vamos descubriendo ese camino tan largo, tan duro y de tanto sufrimiento que lleva al paraiso soñado de Europa pero que nunca es tal paraiso.
Os aconsejo el leerlo también para percibir y sentir lo que muchos viven y sienten al llegar aquí. Buena lectura Ángel

lunes, 20 de abril de 2009

¿Quien mató a Jesús?





Alguna foto más de la Pascua de Guardamar y de los carteles que nos adornaron

¿Quien mató a Jesús?









Queridos amigos este año hemos colaborado, una vez más, con los hermanos Maristas en la Pascua que ellos organizan para jóvenes que se preparan a recibir la Confirmación. Este año eran 53 y los animadores 10. El ambiente ha sido muy bueno y enriquecedor. Aquí veis algunas fotos de lo que hicimos en la mañana del viernes santo. Ese día intentamos revivir "El juicio contra Jesús" y nos preguntamos "¿Quien mató a Jesús?". Nos dividimos en 5 grupos y cada uno intentó defender a su acusado: Pilatos, Herodes, Caifás, Judas y el Capitán Benjamin. Este año hubo una novedad y fue la del testigo protegido que al final nos hizo ver nuestra hipocresia y nuestro silencio.

domingo, 19 de abril de 2009

Crisis. Pascua de Sucina

LA CRISIS A NIVEL SOCIAL
(reflexión para el jueves santo en la Pascua de Sucina)

La crisis no parece un tema propio para Semana Santa. Pero es nuestra realidad, la palabra que más ha sonado en lo que llevamos de año (noticias, publicidad…) y según la entendamos, también la Semana Santa es la celebración de una crisis vital… Pero vamos por partes, ante todo, ¿qué entendemos por crisis?

La palabra crisis se suele relacionar con fracaso, desastre… Originariamente la palabra crisis significa juicio, decisión. Según el diccionario es un momento decisivo, o un proceso de profundas transformaciones, así que el significado de esta palabra no es únicamente negativo.

Si la crisis es un momento decisivo, entonces puede ser una gran oportunidad y a la vez conlleva el riesgo de equivocarse. Para preparar este día he puesto en el buscador las palabras “crisis” y “oportunidad” y me he encontrado con muchas páginas que hablan de ambas cosas. Mi sorpresa ha sido que muchas de ellas eran páginas de marketing comercial… Entre otras cosas, he aprendido gracias a los Simpson que en chino las palabras “crisis” y “oportunidad” se dicen igual.

Esto de la crisis como decisión recuerda a Moisés ante la zarza ardiendo y las palabras que escucha: “descálzate, porque la tierra que pisas es terreno sagrado”. En tiempo de crisis cada paso que damos va precedido de un discernimiento y merece plena atención.

La que más escuchamos a nuestro alrededor es la crisis económica, y de hecho ahí están los datos: 3.600.000 parados, expedientes de regulación de empleo, las Caritas que han duplicado el número de familias que ayudan… No vamos a detenernos en el análisis de las causas de esta crisis ni en la lectura de lo que significa, entre otras cosas por la división de opiniones: para unos se trata del fin del sistema capitalista mientras que para otros se trata de un reajuste para reforzar ese sistema; para unos la respuesta ahora es la austeridad, mientras que para otros es el consumir más…

Pero mirando más profundamente, me atrevo a hablar de tres crisis de base:

1º Crisis ética.
Parece que, teniendo de todo, todo nos está permitido.
En economía, como en otros ámbitos, parecía que todo valía porque la máxima aspiración era el lucro (estafas, burbuja inmobiliaria…).

2º Crisis ecológica.
Hemos vivido más allá de las posibilidades del planeta. Toda la población no puede vivir al ritmo de vida occidental porque el planeta no ofrece recursos para todos.

3º Crisis de la solidaridad.
Hay países en nuestro mundo que llevan siglos en crisis.
Mirando únicamente a nuestro país, parece que no todos están dispuestos a soportar las consecuencias de la crisis por igual. Aunque es una crisis global, no está afectando a todos por igual.
Y entonces, sabiendo que nosotros no tenemos en nuestra mano los recursos para resolver la crisis de forma constructiva a nivel mundial, pero sí que estamos llamados a echar una mano en nuestro entorno y proponer caminos de esperanza, ¿qué podemos hacer? Incluyo aquí las 10 propuestas hechas por Monseñor Antonio Ceballos, obispo de Cádiz y Ceuta, en su carta pastoral para la Cuaresma del 2009:

1º Revisar nuestra vida personal en esta Cuaresma sobre nuestros descontroles: egoísmo, avaricia, codicia, deseos de aparentar, deseos de poseer cosas y la falta de vida sobria y sencilla. Esto lo podemos hacer personalmente o dentro de nuestros grupos de formación.

2º Conocer y saber lo que es pasar por la situación económica y de paro en las familias sin trabajo, jóvenes sin empleo ni esperanza, barrios marginados que carecen de casi todo lo necesario, promoviendo una adecuada toma de conciencia por parte de la comunidad cristiana que nos lleve a una actitud de solidaridad cristiana.

3º Atender, de manera especial, a las familias emigrantes. Y, para todos, crear unos espacios de atención y seguimiento para que entre todos se puedan encontrar soluciones conjuntas. Os propongo, con todo cariño, y sé que se hace, intensificar el acompañamiento de las personas y las de familias que vengan en busca de nuestra ayuda.

4º Recortar, por parte de los empresarios cristianos y de buena voluntad, las ganancias económicas en favor de mantener los puestos de trabajo, evitando los despidos. Es el momento de una justa negociación.

5º Entregar, empezando por mí, los sacerdotes, religiosos, religiosas y todos los cristianos de la diócesis, el 10% (el diezmo) de nuestro salario a Caritas Diocesana para los afectados por la crisis. Al menos podría hacerse esta acción durante toda la Cuaresma como limosna penitencial. Consumir menos para que otros puedan consumir.

6º Pongamos atención a las informaciones y propuestas que durante todo este tiempo de la crisis nos haga Caritas Diocesana que será la que distribuya entre las caritas parroquiales más necesitadas lo que generosamente vayamos entregando. Caritas nos indicará la forma más efectiva de hacerlo. Es fundamental la coordinación.

7º Pero no basta con las acciones personales, también debemos tomar conciencia de esta situación en nuestras instituciones diocesanas. Por esto pido a las parroquias, a las hermandades y cofradías, a las delegaciones y secretariados, a las comunidades neocatecumenales y carismáticas, a los movimientos y asociaciones que, de sus propios ingresos, hagan también un signo visible de solidaridad y sobriedad. La Conferencia Episcopal Española ha distribuido entre las Caritas Diocesanas la cantidad de 2 millones de euros.

8º Concienciar, por parte de los párrocos y catequistas, a los que celebren algunos de los Sacramentos para que sean sobrios tanto en el momento de la celebración litúrgica como en la fiesta que, con tal motivo, se suele realizar.

9º Volver a releer en los grupos algunos textos de la Doctrina Social de la Iglesia para replantearnos los valores cristianos que siempre, pero ahora más, deberíamos tener presentes.

10º Hacer oraciones en la Eucaristía, en las celebraciones litúrgicas y en la catequesis de los niños, para que Dios inspire a los gobernantes y ayude a todos los hombres y mujeres a encontrar las justas soluciones al problema de la crisis económica y social.

Sin negar el valor de estas propuestas, vemos que se quedan más en un nivel de aliviar el sufrimiento de quienes ya están padeciendo la crisis, pero menos en el nivel de denuncia de las causas injustas que han llevado a la crisis y en el de creación de nuevas estructuras. Sin duda hay más acciones posibles que están a nuestro alcance y podemos iniciar o reforzar ¿Se te ocurren otras? ¿Cuáles?
Y también resulta importante conocer lo que ya algunas personas han hecho ¿Conoces casos concretos de personas que han demostrado su solidaridad durante esta crisis?

Jueves Santo es el día del amor fraterno. Jesús prepara una mesa ante nosotros. En esa mesa todos estamos sentados en plano de igualdad. Nos escandalizaría ver una mesa en la que unos están sentados encima de la mesa, otros debajo de ella… Desde luego, no sería la situación mejor para compartir lo que hay como comida, nos revelaría una mesa dividida y no una mesa fraterna.

Sin embargo, el centro de la reunión y el punto de referencia, Jesús, se va a poner a los pies de los otros comensales en un momento de esa comida para lavarles los pies. Y va a pedir a los suyos hacer lo mismo. Siguiendo lo que el mismo Jesús dice en otro momento: “¿Quién es el más importante, el que está a la mesa o el que sirve? Sin duda el que está a la mesa. Pues bien, yo estoy en medio de vosotros como el que sirve”.
En esa mesa no van a comer unos más que otros, todos van a quedar saciados porque es una mesa de fiesta. Y a demás de la comida en sí, va a estar también ese compartir algo más profundo: la vida de Jesús entregada por amor.

Esa mesa Jesús la prepara para todos, incluidos aquellos que ya han preparado su traición. No es la mesa de los mejores, sino la mesa de quienes han seguido a Jesús y están cerca de él en ese momento. El criterio para poder participar en esa mesa, compartir el pan y el vino y recibir el lavado de los pies no es un juicio moral, sino el valor supremo del amor.

viernes, 17 de abril de 2009

Pascua de silencio (4)

Os propongo el texto de la intervención de la hermana Prima Bosco de las Misioneras de Cristo Jesús.
Originaria de la India, vive y trabaja actualmente en la comunidad de Javier. Su testimonio nos gustó muchísimo.


Lo primero quiero dar gracias a Dios por esta oportunidad de conocer y comunicar con vosotros mis experiencias como una religiosa de la India.
Me llamo Prima, soy del sur de la India. El sur de la India es totalmente diferente del oeste de la India. Desde pequeña, yo estaba buscando una congregación donde yo pudiera dar mi vida a la gente más sencilla y pobre y quiero dar gracias a Dios por mi vida. El me ha creado y me ha dado muchas cosas, todo lo que necesito por mi padre y mi madre, hermanas, hermanos, amigos y amigas, maestros y mis hermanas misioneras de Cristo Jesús. Y quiero compartir con todos los hermanos que lo necesitan. En el evangelio según Mateo 25,40, Jesús dice : “Os aseguro que lo que hayáis hecho a estos mis hermanos menores me lo hicisteis a mí.” He aprendido de mi padre y madre esta lección del evangelio y quiero practicarla y vivirla. También quiero dar gracias a Dios por tanto amor que he recibido en mi vida y quiero compartir este amor con alegría a todos especialmente a mis hermanos necesitados.
Un día encontré esta congregación de misioneras de Cristo Jesús y me uní a ellas en el año 1989. Y me impresionó su forma de vivir la misión en sencillez, siendo contemplativas en la acción. Nuestras comunidades están en zona rural y donde vive la gente más pobre. Nada nos impide estar cerca de la gente cuando nos necesitan.
Aunque soy consciente de mis limitaciones, no me impide estar cerca de los pobres. Desde que estoy en esta congregación trabajando por la gente pobre, mi vida se ha enriquecido y me siento muy feliz.
Estuve en Mumbay trabajando en una escuela donde dan educación informal. Eran niños con muchos problemas con sus familias. No querían ir a sus casas porque no tenían ni comida ni paz en su casa. No sabían que es amor en su vida. Sus padres alcohólicos y maltrataban a sus madres. También los políticos los usaban para atacar a musulmanes y cristianos por dinero. Desde pequeños los niños aprenden a ser crueles. Los niños se quedaban todo el día sin comer y algunos también van a trabajar después de la escuela si comer. Yo pude visitarles en sus casas, que son chabolas. En principio los niños no querían invitarme a su casa porque son casas de barro. Poco a poco pude ir teniendo experiencia de sus vidas. Ver cómo viven me ha ayudado a vivir una vida sencilla y ha crecido mi deseo de compartir y participar en sus dolores y sus vidas. Ellos necesitan que se les escuche y que estemos a su lado. Aparte de enseñarles a escribir y a leer, necesitan de nuestro apoyo y consejo.
El gobierno tiene proyectos para pobres pero les piden dinero y documentos, lo que no tienen. Por eso no trabajan con el gobierno. Los niños y sus padres y madres van a trabajar pero la gente les paga muy poco. Cuando piden más dinero, pierden sus trabajos. Por eso trabajan por poco dinero. Tratamos de ayudarles dándoles información y acompañándoles cuando nos necesitan. Los pobres han hecho mi vida más humana y más desprendida y pobre.
Cuando estuve en Gujarat con las tribus, su condición era diferente. No sabía ni leer y ni escribir. Eran muy ignorantes. Por eso la gente del gobierno y la gente rica que vive en su pueblo tratan de engañarlos y robarles sus tierras y sus propiedades y se benefician a costa de los pobres. No tienen que comer ni conocimientos de sus derechos. Mientras tanto me cambié mi profesión a enfermera. En Gujarat en el pueblo no tenemos medico. Por eso por la mañana yo quedo en el dispensario y después de la comida voy a los pueblos lejos. Y como la gente no sabe ni leer ni escribir, formamos escuelas debajo de los árboles y les enseñamos sus derechos y a leer y escribir y les acompañamos en sus necesidades. Los ricos del pueblo nos culpan a nosotras que estamos convirtiendo a la gente pobre del hinduismo al cristianismo. Muchas veces yo he tenido problemas en el pueblo. Los pobres tienen miedo de la gente del gobierno. Porque los policías vienen al pueblo y pegan y se llevan a esta pobre gente a la cárcel sin ninguna causa. Pero los políticos no tienen otra forma de atacarnos sino decir a la gente que las misioneras están convirtiendo a las tribus. Vosotros habéis oído o leído de que los misioneros en Mumbai, Orrisa, Andrapradesh, Bihar que ha sido asesinados por orden de los políticos porque ayudaban a las tribus a saber y practicar sus derechos. Por esta causa han quemado muchas iglesias cristianas y están continuamente amenazando a los cristianos. Aunque algunas veces yo siento miedo, yo recuerdo las palabras de Jesús. No temáis. Mataron a Jesús por estas causas y tenemos el ejemplo de Jesús delante de nosotros.
Hoy la situación de la India es un reto. No se puede ser una religiosa sin una fe grande, en la fuerza, gracia y bendición de Dios. Dios nos da mucho. Pero el demonio hoy pone muchas obstrucciones a vivir los ejemplos de Jesús. Podemos participar en la vida de los pobres con el amor de Dios aquí y ahora en todo.
Mahatma Gandhi dice :
“Lo más atroz de las cosas malas de la gente mala es el silencio de la gente buena”.
“La voz interior me dice que siga compartiendo contra el mundo entero,
Aunque me encuentre sola.
Me dice que no tema a este mundo sino
Que avance llevando en mi nada más que el amor a Dios”.
Queridos hermanas y hermanos, he aprendido en mi vida que Dios está hablando entre nosotros constantemente. Pero yo puedo escuchar su voz solo cuando estoy en silencio y tengo un corazón abierto. Dios está llamando a cada uno a través de la gente que está sufriendo físicamente, psicológicamente y espiritualmente ; nos llama a tender nuestras manos para ayudarles a conseguir más justicia y más paz. Yo puedo escuchar su voz y sentir su presencia, en la gente que está sufriendo, solo cuando Dios es el centro de mi vida y vivo en su amor. La voz de Dios que estamos escuchando en cada momento, en cada minuto, nos ayuda a ser testigo de Dios y nos ayuda a vivir una vida sencilla sin buscar más cosas sino compartir con la gente que no tiene. Así podemos renovar nuestra vida cada día y crecemos en amor de Dios.
Dios nos ha dado esta vida libremente con todo lo que necesitamos. Pero depende de cada persona, como queremos vivir. En la vida tenemos que escoger las cosas buenas y aprender de nuestros padres, maestros, amigos, amigas y de toda la gente buena. Nos ayudará mucho si participamos con frecuencia en la Eucaristía, el sacramento del cuerpo y sangre de Cristo nuestro salvador.

Pascua de silencio (3)