lunes, 28 de abril de 2014

Vocación y misión de Paulino

Hola, mi nombre es Paulino Ramírez Cardoza, soy originario de Ciudad Juárez, Chihuahua, México. Soy Misionero Javeriano, he trabajado y estudiado en Camerún durante 12 años.

A los 14 años he sentido la llamada a la misión, cuando estaba interno en la Ciudad del Niño para que pudiera continuar mis estudios. Allí conviví con las religiosas de “María Dolorosa” responsables del internado. Ellas me enseñaban a rezar cada noche por las misiones, sobre todo por Etiopia y Angola. Es así como poco a poco fui descubriendo mi vocación misionera. Durante mucho tiempo me negué a entrar en el seminario, por diferentes razones y deseos que habitaban mi corazón. Era un joven como todos los jóvenes que estaban en mi alrededor: bailaba, jugaba, asistía a misa y participaba en los grupos de mi parroquia “Jesús Obrero”, que recuerdo con mucho cariño.

Hasta los 23 años no empecé a tomar en cuenta la llamada del Señor, cuando estudiaba la carrera de Administración de Empresas y trabajaba en una cadena de montaje en mi ciudad natal. Entonces comencé a vivir profundamente el deseo de ir a misión. Dejando mi trabajo y mis estudios y convencido de la llamada de Dios a los 26 años entré en la congregación de Misioneros Javerianos para comenzar esta aventura. Hice mi profesión religiosa el 12 de Julio 1998. En el 2001 fui destinado a Camerún donde fui ordenado diacono e hice mi profesión perpetua el 14 de diciembre de 2006 para después ser ordenado sacerdote el 18 de agosto de 2007.

Mi primera destinación fue para Camerún donde terminé mis estudios teológicos en la comunidad de Yaundé y después fui destinado a la Parroquia de “Jesús Le Bon Pasteur.”

Durante casi 7 años estuve trabajando en la parroquia de “Jesús le Bon Pasteur”. He convivido y compartido mi fe con una maravillosa comunidad cristiana que se encuentra en la periferia de la ciudad de Douala, llamada “ Boko Plateau.” Es una zona pantanosa, con muchas dificultades geográficas y socio culturales, pues hay una diversidad de tribus que nos hacían un poco complicado el trabajo misionero, pero llena de alegría de vivir. En esta comunidad trabajé en la formación de catequistas, en la preparación de catecúmenos para su bautismo, en la formación del apostolado de la familia... Fue una experiencia muy rica en humanidad. Los cameruneses me han enseñado mucho sus ganas de salir adelante.

Camerún para mí fue una gracia de Dios que me ha permitido ver su presencia en cada una de las actividades que realicé. Me siento satisfecho de haber trabajado en esta comunidad, pues me ha permitido sentirme útil en las manos de Dios. He descubierto la importancia de hacer presente a un Dios vivo en medio de tanta necesidad, pero sobre todo a descubrir los valores de un pueblo sediento de vida y paz.

Ahora me encuentro en España, destinado a trabajar en la comunidad de Murcia. Muy contento y dispuesto a seguir compartiendo y cumpliendo con la Misión que Dios nuestro Padre tiene designada para mí. Agradezco a la comunidad que me ha acogido y espero en Dios que pueda responder con dignidad al trabajo que me es confiado.

viernes, 25 de abril de 2014

Una Pascua de regalo

La pascua javeriana “Mareas que cambian vidas” celebrada en la parroquia Reina de los Apóstoles de La Manga (Murcia) ha resultado un gran regalo. Hemos sido pocos y eso ha favorecido un clima de familia y participación. Todos hemos sacado lo mejor de nosotros, hemos vivido con intensidad los tiempos de silencio y hemos tenido oportunidad para compartir y profundizar lo que cada cual iba viviendo. Además nos hemos integrado en los oficios celebrados en la parroquia, con el placer añadido de vivir una vigilia pascual con bautizos.
 
Los temas de nuestra Pascua estaban muy relacionados con el mar. El jueves santo nos guió la frase de Jesús “Rema mar adentro” que nos invitaba a adentrarnos en ese sentimiento oceánico que surge al entrar en el amor de Dios.
 
El viernes santo fueron dos las frases que resonaron fuertemente: “Señor, ¿no te importa que nos hundamos?” ante los momentos de silencio de Dios en los que parece que prevalece la oscuridad, y “La otra orilla”, la necesidad de entablar contacto, de favorecer encuentros con los diferentes, con los que no creen ni piensan como nosotros. Ese día tuvimos muy en cuenta el drama de las pateras. En una de ellas llegó hasta España Kenneth Chikwua Iloabuchi, nigeriano y ahora sacerdote en la Diócesis de Cartagena. Su testimonio fue un brusco despertar a la realidad.  
 
El sábado santo la frase repetida fue “Ánimo, soy yo”, frase pronunciada por Jesús cuando camina sobre las aguas y los suyos lo confunden con un fantasma (como en la resurrección) y ese día nos acompañó un artículo del jesuita José Antonio García sobre la alegría.
Ahora sentimos que hay muchas cosas que hemos vivido en esos pocos días de pascua y que aún no hemos digerido, por lo que es una suerte poder contar con los 50 días del tiempo de Pascua para ir gustando ese poso de plenitud que nos ha quedado tras estos días tan intensos. Al mismo tiempo, vemos que quizá en los ambientes es los que nos movemos nos es difícil expresar tanta plenitud porque quienes están con nosotros no están viviendo en esa dimensión ni podrían entendernos. Esto es también experiencia pascual, pocos entendieron el camino de Jesús y su paso por la cruz.
Un gracias enorme a la parroquia Reina de los Apóstoles por las facilidades a la hora de organizar esta Pascua y por poner a nuestra disposición todas las estructuras parroquiales.
Si alguien está interesado en los materiales que hemos empleado en esta Pascua basta que nos lo pida para que se los enviemos.



miércoles, 16 de abril de 2014

16 de abril de 2014, miércoles santo


miércoles santo

Is 50,4-9a   Sal 68,8-10.21-22.31-34   Mt 26,14-25

 

Judas

 

Palabra de Dios

 

U

no de los doce, llamado Judas Iscariote, fue a los sumos sacerdotes y les propuso: «¿Qué estáis dispuestos a darme, si os lo entrego?». Ellos se ajustaron con él en treinta monedas. Y desde entonces andaba buscando ocasión propicia para entregarlo.    (Mt 26,14-15)

 

Reflexión

     Judas vende a Jesús por treinta monedas de plata. Por el más bajo móvil que nos podamos imaginar y al valor de un siervo (Ex 21,32). Nada hubiese podido ser más vulgar e ignominioso. Lo que las profecías anunciaron, se cumple. La acción de Judas, presente desde siempre a los ojos de Dios, fue realizada por Judas con total y plena libertad. La libertad humana (en este caso mal utilizada) es un don, pero utilizarla rectamente es una conquista y es fruto de la correspondencia a la gracia divina..

 

Oración

“Éste es el cáliz de la salvación”, y lo he rechazado.

R.: Sálvanos por tu amor, ¡oh Padre!

 “Éste es el cáliz de la salvación”, y no lo he bebido hasta el fondo.

R.: Sálvanos por tu amor, ¡oh Padre!

 “Éste es el cáliz de la salvación”, y he dejado solo a Jesús que lo beba.

R.: Sálvanos por tu amor, ¡oh Padre!

 

Liberación de nuestras seguridades

     “Líbranos del mal”: nuestra oración termina apelando al amor de Dios en la seguridad de que dará a todos la ayuda necesaria para superar la prueba, para seguir la peregrinación.

     Líbranos, Señor, porque en nosotros hay siempre la tentación de buscar seguridades, a pesar de que en nuestro futuro no habrá problemas. Dios nos promete su fidelidad, estar siempre presente en el momento de la prueba y sobre todo cuando más dispuestos estaríamos a rendirnos.

     Nos indicará el camino para salir; Él mismo será la salida.

martes, 15 de abril de 2014

15 de abril de 2014, martes santo


martes santo

Is 49,1-6   Sal 70,1-6.15.17   Jn 13,21-33.36-38

 

Jesús

 

Palabra de Dios

 

«A

 

hora es glorificado el Hijo del Hombre y Dios es glorificado en él. Si Dios es glorificado en él, también Dios lo glorificará en sí mismo: pronto lo glorificará». (Jn 13,31-38)

 

Reflexión

     Jesús luz de las naciones, aquél que con su muerte reunirá a los dispersos. Jesús, aquél que es traicionado, intenta recuperar para el amor a aquél que lo traicionó y a aquéllos que lo abandonan.

     Nuestro amor, por el contrario, está hecho de costumbres y carcomido por el cansancio y por la fatiga. Es un amor incapaz de abrirse al futuro incluso cuando parece que todo esté perdido.

 

Oración

De la tentación de seguir mirando atrás.

R.: Sálvanos por tu amor, ¡oh Padre!

Del rechazo a programar el futuro.

R.: Sálvanos por tu amor, ¡oh Padre!

De las personas que no saben perdonar.

R.: Sálvanos por tu amor, ¡oh Padre!

 

Liberalización realizada en el don de sí mismo

     El Padre Nuestro nos aclara que la verdadera liberación la alcanzamos en nosotros mismos. Se realiza en el don de sí que nos pide algunas posturas básicas para poder realizarse.

     La primera es la de la humildad, que nos lleva a considerarnos deudores ante Dios y ante los demás de todo.

     Otra postura nos lleva a reavivar la conciencia de la propia debilidad: nadie vence al mal con sus solas fuerzas.

     Y por último una postura de confianza porque el Padre está con nosotros y es más fuerte que cualquier obstáculo; porque el perdón del Padre es mayor que cualquier mal.

lunes, 14 de abril de 2014

14 de abril de 2014, lunes santo


                                             lunes santo

Is 42,1-7   Sal 26,1-3.13-14   Jn 12,1-11

 

Marta y María

 

Palabra de Dios

 

S

eis días antes de la Pascua, fue Jesús a Betania, donde vivía Lázaro, a quien había resucitado de entre los muertos. Allí le ofrecieron una cena; Marta servía y Lázaro era uno de los que estaban con él a la mesa. María tomó una libra de perfume de nardo, auténtico y costoso, le ungió los pies a Jesús y se los enjugó con su cabellera. Y toda la casa se llenó de la fragancia del perfume.   (Jn 12,1-3)

 

Reflexión

     Gesto de gratitud y de profecía. Fragancia de una acogida a Jesús que camina hacia la inmolación por la salvación de todos, aceptando el designio del Padre. Alabanza a la vida. Es el perfume del don, de la gratuidad y de la vida que llena la casa, no el de la tristeza y de la muerte.

     Encontramos aquí en contraposición las dos figuras de María y de Judas ejemplos del amor desinteresado y del egoísmo deseoso de dinero. Nos enseñan a no tener miedo de “perder” ni siquiera nuestra vida entregada al Reino, si Dios es el Amado y el Amigo que da sentido a toda nuestra vida.

 

Oración

De la corrupción de la superficialidad.

R.: Sálvanos por tu amor, ¡oh Padre!

De una insuficiente reflexión.

R.: Sálvanos por tu amor, ¡oh Padre!

De una agresividad que se transforma en regla de vida.

R.: Sálvanos por tu amor, ¡oh Padre!

 

Liberación realizada en la inmolación

     Jesús sabía que debía beber hasta el fondo “este cáliz” para cumplir con la voluntad del Padre, para dar la salvación, la libertad, la plenitud de vida. Inmolarse significa vaciar la copa del dolor y de la alegría para que Dios pueda llenarla de vida. Es el camino de la liberación y de la salvación del mundo.

domingo, 13 de abril de 2014

13 de abril de 2014, domingo


domingo de ramos  -  A

Is 50,4-7 ● Sal 21,8-9.17-20.23-24 ● Fil 2,6-11 ● Mt 26,14-27,66

 

Jesús Salvador

 

Palabra de Dios

 

C

risto, a pesar de su condición divina, no hizo alarde de su categoría de Dios; al contrario, se despojó de su rango y tomó la condición de esclavo, pasando por uno de tantos. Y así, actuando como un hombre cualquiera, se rebajó hasta someterse incluso a la muerte, y una muerte de cruz.    (Flp 2,6-8)

 

Reflexión

     Jesús, el Hijo de Dios, se hace siervo obediente hasta la muerte; de siervo humillado se hace Señor ante el cual se dobla toda rodilla. Ha escogido la humillación y el Padre le ha glorificado. No es gloria verdadera la del hombre que quiere levantarse a sí mismo (Adán), sino la del hombre que es levantado por Dios (Jesús de Nazaret). El Padre no se refleja en el orgullo autosuficiente, sino en el humilde que sufre por todos.

 

Oración

Del apego a las comodidades.

R.: Sálvanos por tu amor, ¡oh Padre!

Del buscar el gozo inmediato.

R.: Sálvanos por tu amor, ¡oh Padre!

Del dejarnos seducir por apariencias de felicidad.

R.: Sálvanos por tu amor, ¡oh Padre!

 

Liberación realizada en la obediencia

     Lo intentó todo, Satanás, para disuadir a Jesús de la obediencia al Padre. Y no pudo. Jesús, Mesías y Salvador, sabe que su misión se expresa en la obediencia y en la dedicación al Padre. Todo lo contrario que para Satanás, para quien el ser Hijo de Dios y Mesías significa poder disponer de la potencia del Padre para su gloria propia.

     También la Iglesia está llamada a realizar su misión de salvación en la obediencia al Padre. Y el diablo la tienta para que lleve adelante la salvación confiando únicamente en su poder y en su prestigio.

sábado, 12 de abril de 2014

12 de abril de 2014


sábado quinta semana
Ez 37,21-28 / Sal Jer 31,10-13 / Jn 11,45-57
 
 
Todos creerán en él
 
 
 
Palabra de Dios
 

"O
ss conviene que uno muera por el pueblo y que no perezca la nación entera". Y aquel día decidieron darle muerte.


Reflexión

 
A las puertas de la Semana Santa el círculo de muerte alrededor de Jesús se estrecha. Supuestamente quienes traman su muerte lo hacen pensando en “salvar” al pueblo, cuando en realidad pretender mantener inamovibles sus lugares de poder.

“¿Qué os parece? ¿No vendrá Jesús a la fiesta?” Claro que Jesús irá a la fiesta. Precisamente, sin Él no hay fiesta ¿Nuestra Semana Santa va a ser una celebración con Jesús o sin Él?

 

Oración

Cuando te vi por primera vez, te conocía solo de oídas.

Cuando te acercaste a mí, apenas te miré de reojo.

Cuando pronunciaste mi nombre, te vi sonreír malicioso.

Cuando dejé todo por ti, no te hiciste muchas ilusiones.

Cuando caí, me esperaste.

Cuando te busqué, no estabas lejos.

Cuando te di la espalda, me dijiste: “¿Dónde vas?”

Cuando hice como que no te veía, viniste a habitar mi indiferencia.

Cuando a tientas busqué un amigo, estabas allí por casualidad.

En el silencio más negro te sentía respirar.

En el ojo de la tempestad estabas, pero dormido.

Junto al fuego de mi hoguera llenaste mi soledad.

(Juan José Aguirre, obispo de Bangassou, Centroáfrica)

 

viernes, 11 de abril de 2014

11 de abril de 2014


viernes quinta semana

Jr 20,10-13   Sal 17,2-7   Jn 10,31-42.

 

Blasfemo

 

Palabra de Dios

 

J

esús se marchó de nuevo al otro lado del río Jordán, al lugar donde antes había bautizado Juan, y se quedó allí. Muchos acudieron a él y decían: «Juan no hizo ningún signo; pero todo lo que Juan dijo de éste, era verdad». Y muchos creyeron en él allí.   (Jn 10,40-41)

 

Reflexión

     Jesús no ha sido condenado a muerte por predicar la justicia y tampoco porque los milagros que hacía preocuparan a los potentes. Fue condenado porque se declaró Hijo de Dios. Le han llamado fanático y endemoniado; le llaman blasfemo. Menos mal que muchos creyeron en él.

     Si somos parte de este grupo, debemos acoger a Jesús de forma radical, hasta la cruz; y cambiar nuestro estilo de vida. Si nos consideramos sus ovejas debemos estar siempre abiertos a la fe.

 

Oración

Danos la constancia de los pequeños pasos.

R.: Necesitamos de tu perdón, ¡oh Padre!

Haznos caminar por senderos de paciencia.

R.: Necesitamos de tu perdón, ¡oh Padre!

Condúcenos hacia cumbres siempre nuevas.

R.: Necesitamos de tu perdón, ¡oh Padre!

 

Crea en mí un corazón nuevo

     No tiene sentido que se nos perdonen las deudas si seguimos endeudándonos. Es necesario ese cambio que la potencia creadora de Dios puede hacer en nosotros dándonos un corazón nuevo. Crea en mí un corazón nuevo; renueva en mí un espíritu firme (Sal 50).

     Un corazón que nos haga conocer nuestra impotencia y proclame nuestra confianza en la misericordia del Padre. Tener confianza en el poder de Dios que puede renovarnos: éste es el acto específico de esta cuaresma. De aquí arranca todo camino de conversión sincera y duradera.

jueves, 10 de abril de 2014

10 de abril de 2014


jueves quinta semana

Gn 17,3-9   Sal 104,4-9   Jn 8,51-59

 

Vida y muerte

 

Palabra de Dios

 

J

esús dijo a los Judíos: «Os aseguro: quien guarda mi palabra no sabrá lo que es morir para siempre». Los judíos le dijeron: «Ahora vemos claro que estás endemoniado. Abrahán murió, los profetas también, ¿y tú dices: Quien guarde mi palabra no conocerá la muerte para siempre?»      (Jn 8,51-52)

 

Reflexión

     Lo que extraña en los evangelios es ver cómo las autoridades no han logrado reconocer en Jesús al Mesías esperado. Su función los habilita a reconocer al Mesías pero no llegan a descubrir la personalidad divina de Cristo.

     El gran problema entonces es descubrir esta personalidad divina de Jesús y tener la fe necesaria para entrar en esta personalidad, más allá de los signos y de los acontecimientos.

 

Oración

Vivimos sólo si nos sentimos protegidos por ti.

R.: Necesitamos de tu perdón, ¡oh Padre!

Esperamos sólo si tenemos la seguridad de tu cercanía.

R.: Necesitamos de tu perdón, ¡oh Padre!

Amamos sólo si tenemos la sobreabundancia de tu amor.

R.: Necesitamos de tu perdón, ¡oh Padre!

 

Promoviendo la reconciliación

     Para perdonar a los que nos han herido hace falta recorrer un largo camino interior. El punto de llegada es la reconciliación, que es al mismo tiempo esfuerzo del hombre y regalo de Dios. La reconciliación nos indica que el perdón es algo siempre ofrecido, es promesa de futuro puesta a nuestra disposición para permitirnos vivir en el hoy de Dios.

     Para evidenciar la presencia permanente del perdón de Dios entre nosotros, la Iglesia dispone de unas personas, constantes operadores de este perdón.

miércoles, 9 de abril de 2014

Pascua en La Manga

 
Del 16 al 20 de abril de 2014.
En la parroquia Reina de los Apóstoles de La Manga (Murcia).
Llegada el miércoles santo día 16 e inicio el jueves santo día 17.
Mañanas, oración y tema formativo a las 10.
Tardes, oficios con la parroquia.
Temas:
Jueves santo, "Rema mar adentro."
Viernes santo, "Señor, ¿no te importa que nos hundamos?"
Sábado santo, "Caminando sobre las aguas."
Domingo de Pascua, regreso a casa tras la eucaristía parroquial de las 10 de la mañana.
Los gastos serán los correspondientes a la alimentación y el viaje de cada cual.
El alojamiento nos lo ofrece la parroquia.
Inscripciones en murcia@javerianos.org o en el teléfono 968 29 29 79.

 

9 de abril de 2014


miércoles quinta semana

Dn 3,14-20.91-92.95   Sal Dan 3,52-56   Jn 8,31-42

 

Libertad

 

Palabra de Dios

 

S

i fuerais hijos de Abrahán, haríais lo que hizo Abrahán. Sin embargo, tratáis de matarme a mí, que os he hablado de la verdad que le escuché a Dios, y eso no lo hizo Abrahán. Vosotros hacéis lo que hace vuestro padre». Le replicaron: «Nosotros no somos hijos de prostitutas; tenemos un solo padre: Dios». Jesús les contestó: «Si Dios fuera vuestro padre, me amaríais, porque yo salí de Dios, y aquí estoy. Pues no he venido por mi cuenta, sino que Él me envió».   (Jn 8,39-42)

 

Reflexión

     ¿Vivir en libertad o en esclavitud? Ser libre significa pertenecer a Dios, hacer su voluntad, realizar el bien, obrar según verdad. Ser esclavo significa ir orgullosamente por su propio camino. Para vivir plenamente la libertad de los hijos de Dios, hace falta tener el valor de volver a ponerse en camino todos los días, al igual que Abrahán, confiando sólo en Dios.

 

Oración

Por no haber tomado en serio nuestra vida.

R.: Necesitamos de tu perdón, ¡oh Padre!

Por no haber sido sinceros con nosotros mismos.

R.: Necesitamos de tu perdón, ¡oh Padre!

Por habernos escondido detrás de caretas de  ilusiones.

R.: Necesitamos de tu perdón, ¡oh Padre!

 

Perdonar sin medida a los enemigos

     “Amad a vuestros enemigos y orad por los que os persiguen” (Mt 5,44). Amar y rezar es algo más que un simple perdón; es mucho más que responder a la violencia con la violencia. Hay que amar a los enemigos con amor lleno, activo, solidario, que no espera ninguna recompensa.

     Y a los enemigos se les perdona y se les ama sin medida para demostrar que somos discípulos de Cristo. Hay que testimoniar al mundo que de tal Padre tales hijos.