Es ya tradición que, aunque saliendo del DF haya nubes, al llegar a las pirámides de Teotihuacan luzca un buen sol y que todo lo que dejamos desprotegido de protectores solares en nuestro cuerpo resulte bien rojo al final de la jornada. Es el tributo que pagamos al dios sol, que ya no nos pide sacrificios humanos pero que nos deja marcados... Las pirámides, como siempre grandiosas, tenían ganas de vernos. Con las fatigas de rigor llegamos a cumbre de las tres más altas: la de la serpiente emplumada, la del sol y la de la luna.
Comimos en un lugar de buffet para no tener que marear al camarero preguntándole continuamente por la composición de cada plato que la variadísima comida mexicana ofrece, porque por sus nombres no los identificamos.
Y a la tarde visitamos La Villa, es decir, la basílica de Guadalupe y su "parque temático", como alguien en visitas anteriores y con mucho ingenio describió el montón de capillas e iglesias que por allí hay. Como somos gente "de altura" y muy deportistas, también aquí nos fuimos hasta lo más alto: el cerro del Tepeyac, y descendimos justo antes de que la lluvia nos aguase la fiesta. Una vez más, y prácticamente ha sido así en cada una de las visitas que hemos hecho a la Guadalupana, la Virgen nos ha protegido con el manto de su basílica de la fuerte lluvia.
Ya en la casa de los javerianos en que nos hospedamos, un javeriano con muchos años de experiencia en la misión de Santa Cruz nos pudo hacer un rápido e interesante recorrido sobre la historia de esa misión y de sus gentes. Viendo a nuestro grupo tan "femenino" y tan "magisterial" (las tres chicas son maestras o profesoras) nos ha recomendado que dediquemos esfuerzos durante nuestra estancia en la misión al tema educativo, pero sobre todo a la escucha de las mujeres y muchachas, que necesitan sentirse queridas en lo que son y en su cultura. Sabemos que nuestro desconocimiento de la lengua náhuatl, que en algunas comunidades se habla de forma habitual, puede sernos un obstáculo, pero no por eso desistimos de vivir esta experiencia y de sentirnos interpelados por esta nueva realidad que vamos a descubrir.
Ahora mismo estamos en la comunidad de la teología, la segunda comunidad que los misioneros javerianos tenemos en México DF. Hemos tomado al asalto los ordenadores aprovechando que aquí las instalaciones son buenas y que la casa está casi vacía... ¡Han huido al vernos llegar! No, lo que pasa es que los estudiantes (han sido 13 este año) están o de vacaciones o en campamentos vocacionales, y la comunidad de misioneros ya profesos (son 4) también está la mitad de vacaciones.
Antes hemos visitado Tlatelolco, el que fue el último bastión de resistencia azteca frente a Hernán Cortés cuando las relaciones se volvieron belicosas. Tlatelolco es también llamada la plaza de las Tres Culturas por las ruinas aztecas, la iglesia que se construyó sobre ellas aprovechando las piedras de dichas ruinas y los edificios del mundo moderno que rodean el conjunto.
La ciudad de México nos impresiona por sus dimensiones:.la ciudad más extensa del mundo cuenta con unos 25 millones de personas y nos han dicho que genera 12.000 toneladas diarias de basuras. Es difícil organizar una macro ciudad así, pero nos está resultando realmente caótica (y eso que hemos evitado los transportes en horas punta), con aceras bastante sucias y cruces de calles sin semáforos y donde atravesar al otro lado se convierte en una aventura.
Ya mañana dejaremos este mundo urbano y nos adentraremos por los bellos paisajes de la Sierra Madre Oriental hacia nuestro destino: la misión de Santa Cruz.
No os asustéis si pasamos ahora dos semanas sin mandar mensajes. La idea es llegar mañana a la tarde a la misión de Santa Cruz (donde la conexión a internet es desesperantemente lenta) e ir ya pasado mañana a la primera de las dos comunidades que vamos a visitar, que se llama Xochizintla, palabra náhuatl que significa "flor de arriba" porque es una comunidad en alto, y pasar allí unos 10 días. En otra de las 34 comunidades que se atienden desde la misión central pasaremos posteriormente otros 10 días. Entre medias podemos contar con unos días de descanso en que aprovecharemos para dar noticias si nos es posible.
Besos y abrazos y gracias por los mensajes que me habéis mandado y que no respondo personalmente por falta de tiempo.
Antxon
No hay comentarios:
Publicar un comentario